El Pabellón Dorado es un lugar que no puedes perderte de visita en Kyoto. Te lo digo porque durante mi primer viaje no tuve oportunidad de visitarlo y tuve que esperar a volver a viajar para cumplir. Aunque entonces sí, pude visitarlo y tomarle muchas fotos que hoy almaceno en mi ordenador y que de tanto en tanto se convierten en mi fondo de escritorio.
El Pabellón Dorado fue originalmente construido en 1397 por Yoshimitsu Ashikaga, un retirado shogun que era a su vez el nieto del fundador del gobierno de Ashikaga que duró 230 años en tiempos en donde la familia imperial estaba dividida y en constante enfrentamiento. En su momento, Yoshimitsu heredó el poder muy joven pero con los años se convirtió en un buen y muy capaz gobernante.
Cuando hizo lo suyo dejó el gobierno en manos de su hijo y se retiró, construyéndose para eso otro palacio en la zona de Kitayama de la misma ciudad. Los terrenos estaban un poco feos pero los embelleció y construyó una mansión rodeada de un campo de flores y un estanque donde se combinaban con encanto flores, agua y piedras. Y en este entorno casi mágico brillaba bajo el sol el Pabellón Dorado.
El Pabellón Dorado era y es una estructura de tres pisos de altura recubierto de pan de oro o láminas de oro, una pepita de oro en un mar de esmeraldas. Era el lugar de reunión de Yoshimitsu y sus amigos y familias aristócratas, sacerdotes budistas y samurais de rango alto. Muchos eran intelectuales, algo que el propio Yoshimitsu se consideraba, así que el Pabellón Dorado oficiaba como un club de artistas y grandes pensadores.
Por ejemplo, era un lugar frecuentado por los creadores del Teatro Noh y fue gracias al ex shogun que este arte pudo crecer y desarrollarse. Bien, que muerto Yoshimitsu y siguiendo sus últimos deseos la mansión pasó a manos del budismo Zen y se convirtió en un monasterio llamado Rokuon-ji. Así sobrevivió siglos, pero en 1950 sufrió un incendió y quedó destruido.
El incendió, convertido en novela por el genial Yukio Mishima le valió al escritor fama internacional, pero el edificio fue reconstruido en 1955 a su forma original y hoy podemos disfrutarlo en toda su hermosura.
Información práctica sobre el Pabellón Dorado:
. Horario: abre todos los días de 9am a 5pm
. Precio: 400 yenes.
. Cómo llegar: desde la estación de Kyoto, en el autobús 101 o 205 hasta la parada Kinkakujido.